EL TERRORISMO INTERNACIONAL NO EXISTE

El general Leonid Ivashov era el jefe del Estado Mayor de las fuerzas armadas rusas en el momento de los atentados del 11 de septiembre de 2001. Este militar, que vivió los hechos desde dentro, nos ofrece un análisis muy diferente al de sus colegas estadounidenses. Al igual que en su intervención ante la conferencia Axis for Peace 2005, nos explica en estas líneas que el terrorismo internacional no existe y que los atentados del 11 de septiembre fueron un montaje. Lo que estamos viendo no es más que un terrorismo manipulado por las grandes potencias y no existiría sin ellas. Afirma que, en vez de fingir una «guerra mundial contra el terrorismo», la mejor manera de reducir los atentados se encuentra en el restablecimiento del derecho internacional y la cooperación pacífica entre los Estados así como entre sus ciudadanos.

Como lo demuestra la situación mundial, el terrorismo aparece allí donde se exacerban las contradicciones, donde se produce un cambio en las relaciones sociales o un cambio de régimen, donde aparece una inestabilidad política, económica o social, donde se libera algún potencial agresivo, donde aparece la decadencia moral, donde triunfan el cinismo y el nihilismo, donde se legaliza el vicio y donde prolifera la delincuencia.

Es la globalización la que crea las condiciones para esos fenómenos extremadamente peligrosos. Es en ese marco que se produce el nuevo trazado del mapa geoestratégico mundial, que se redistribuyen los recursos del planeta, que se deshacen las fronteras de los Estados, que se hace pedazos el derecho internacional, que se borran las particularidades culturales, que la vida espiritual se empobrece...

El análisis de la esencia del proceso de globalización, y de las doctrinas políticas y militares de Estados Unidos y de ciertos países, prueba que el terrorismo contribuye a concretar un dominio mundial y la sumisión de los Estados a una oligarquía global. Eso significa que el terrorismo no es un ente independiente de la política mundial sino simplemente un instrumento, un medio para instaurar un mundo unipolar con un centro único de dirección mundial, un pretexto para borrar las fronteras nacionales de los Estados e instaurar el dominio de una nueva élite mundial. Precisamente esa élite constituye el tema clave del terrorismo mundial, es su ideólogo y su «padrino».

El blanco principal de la élite mundial es la realidad natural, tradicional, cultura e histórica, es el sistema existente de relaciones entre Estados, el orden mundial nacional y estatal de la civilización humana, es la identidad nacional.

El terrorismo internacional actual es un fenómeno que combina el empleo del terror por parte de estructuras políticas estatales y no estatales como medio de alcanzar sus objetivos políticos mediante la intimidación, la desestabilización social y sicológica de la población, la anulación de la voluntad de resistencia de los órganos del poder y la creación de condiciones propicias para la manipulación de la política del Estado y la conducta de sus ciudadanos.

El terrorismo es el arma utilizada en un nuevo tipo de guerra. Al mismo tiempo, el terrorismo internacional, en contubernio con los medios de difusión, se convierte en el sistema de gestión de los procesos globales. Es precisamente la simbiosis entre los medios y el terror lo que crea las condiciones que permiten imprimir giros a la política internacional y modificar la realidad existente.

Si analizamos en ese contexto lo sucedido el 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos, podemos llegar a las siguientes conclusiones:

1. Los organizadores de aquellos atentados son los círculos políticos y los círculos de negocios que tenían interés en desestabilizar el orden mundial y disponían de los medios necesarios para financiar la operación. La concepción política de ese acto maduró allí donde aparecieron tensiones en la administración de los recursos –financieros y de otro tipo. Hay que buscar las razones de los atentados en la coincidencia de intereses del gran capital a nivel transnacional y global, en los círculos que no están satisfechos con el ritmo del proceso de globalización o la dirección que toma ese proceso.
A diferencia de las guerras tradicionales cuya concepción determinan políticos y generales, los iniciadores fueron esta vez oligarcas y políticos sometidos a éstos.

2. Únicamente los servicios secretos y sus jefes actuales o en retiro –pero que mantuvieron influencia dentro de las estructuras estatales– tienen la capacidad de planificar, organizar y dirigir una operación de tal envergadura. Generalmente son los servicios secretos quienes crean, financian y controlan las organizaciones extremistas. Sin apoyo de los servicios secretos ese tipo de estructuras no puede existir –y mucho menos efectuar acciones de tal envergadura dentro de países particularmente bien protegidos. Planificar y realizar una operación de esa escala es extremadamente complicado.

3. Osama bin Laden y «Al Qaeda» no pueden ser ni organizadores ni ejecutantes de los atentados del 11 de septiembre. No disponen ni de la organización requerida para ello ni de los recursos intelectuales o los cuadros necesarios. Por consiguiente, hubo que crear un equipo de profesionales y los kamikazes árabes son figurantes utilizados para enmascarar la operación.

La operación del 11 de septiembre modificó el curso de los acontecimientos en el mundo en la dirección que habían escogido los oligarcas internacionales y la mafia transnacional, o sea quienes aspiran a controlar los recursos naturales del planeta, la red mundial de información y los flujos financieros. Esa operación favoreció también a la élite política y económica de Estados Unidos que aspira también a la dominación global.

 

La utilización del término «terrorismo internacional» apunta a los siguientes objetivos:

enmascarar los verdaderos objetivos de las fuerzas desplegadas a través del mundo en la lucha por la dominación y el control;
desviar los reclamos de los pueblos hacia una lucha de objetivos indefinidos contra un enemigo invisible;

destruir normas internacionales fundamentales, alterar la concepción de términos como: agresión, terror estatal, dictadura o movimiento de liberación nacional;

privar a los pueblos de su legítimo derecho a la resistencia armada contra la agresión y a la acción contra el trabajo de zapa de servicios extranjeros de inteligencia;

establecer la renuncia a la defensa prioritaria de los intereses nacionales, transformar objetivos en el plano militar mediante un deslizamiento hacia la lucha contra el terrorismo, violar la lógica de las alianzas militares en detrimento de una defensa conjunta y que favorezca la coalición antiterrorista;

resolver problemas económicos mediante una fuerte imposición militar que tome como pretexto la lucha contra el terrorismo.

Para luchar eficazmente contra el terrorismo internacional es necesario tomar las siguientes medidas:

confirmar ante la Asamblea General de la ONU los principios de la Carta de las Naciones Unidas y del derecho internacional como principios que todos los Estados están obligados a respetar;

formar una unión geoestratégica de civilización (tomando quizás como base la Organización de Cooperación de Shangai, en la que se agrupan Rusia, China, Kazajstán, Kirguizistán, Tayikistán y Uzbekistán) con una escala de valores diferente a la de los atlantistas; elaborar una estrategia de desarrollo de los Estados, un sistema de seguridad internacional, otro modelo económico y financiero (lo cual significaría asentar de nuevo el mundo sobre dos pilares);

vincular (bajo la égida de la ONU) las élites científicas a la elaboración y promoción de los conceptos filosóficos del Ser Humano del siglo XXI;

organizar la interacción de todas las confesiones religiosas del mundo, en nombre de la estabilidad del desarrollo de la humanidad, de la seguridad y del apoyo mutuo.

 

 

 

 

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LOS ORÍGENES SECRETOS DE LA ORDEN SKULL & BONES

La historia comienza en Yale, donde tres ramas de la historia americana: espionaje, drogras, tráfico ilegal y sociedades secretas, se combinan en una.

Elihu Yale nació cerca de Boston, fue educado en Londres, y sirvió en la Compañia militar británica del este de India. Eventualmente, se convirtió en el gobernadors del Fuerte Saint George, Madras, en 1687. Amasó una gran fortuna y regresó a Inglaterra en 1699. A Yale se le conoció como filántropo; al recibir una propuesta del Collegiate School en Connecticut, envió una donación y libros. Después de esto, Cotton Mather sugirió que la escuela fuera llamada Yale College, en 1718.

Una estatua de Nathan Hale se encuentra en el viejo campus de la Universidad de Yale. Existe una copia en frente de las oficinas de la CIA en Langley, Virginia. Y otra más, se encuentra enfrente de la Academia Phillips en Andover, Massachusetts (donde George H. W. Bush asistió a la preparatoria y formó parte de una sociedad secreta desde los doce años).

Nathan Hale, junto con otros tres graduados, fue miembro del "Culper Ring", una de las primeras operaciones de inteligencia. Esta operación fue establecida por George Washington, y fue exitosa a lo largo de la guerra de revolución. Nathan fue el único operario que fue encontrado por los británicos, y después de hablar de sus deseos, fue colgado en 1776. Desde la fundación de la república, la relación entre la universidad de Yale y la "Comunidad de Inteligencia" ha sido única.

En 1823, Samuel Russel estableción la empresa "Russell and Company" con el propósito de adquirir opio en Turquía y contrabandearlo hacia China. "Russen and Company" se fusiono con el sindicato Perkins en 1830 y se convirtió en el principal traficante americano de opio. Muchas de las grandes fortunas americanas se hicieron en base al tráfico ilegal de opio a China.

Uno de los jefes de la compañia en Canton fue Warren Delano, Jr. abuelo de Franklin Roosevelt. Otros socios de Russell eran John Cleve Green (quien financiaba Princeton), Abiel Low (quien financiaba construcciones en Columbia), Joseph Coolidge y los Perkins, Sturgis y la familia Forbes. El hijo de Coolidge organizo la United Fruit company, y su nieto, Archibald C. Coolidge, fue el cofundador de el Consejo de Relaciones Internacionales.

William Huntington Russel, primo de Samuel, estudió en Alemania en 1831-32. Alemania era una fuente de nuevas ideas. El método científico se aplicaba en todas sus formas. Prussia tomó los principios acuñados por John Locke y Jean Rosseau y creó un nuevo sistema educacional. Johan Fichte, en sus "Address to the German People" afirmó que los niños serían tomados por el estado y se les diría que pensar y como pensarlo.

Georg Willhelm Friedrich Hegel tomó la silla de Fichte en la Universidad de Berlín en 1817, y fue su profesor hasta su muerte en 1831. Hegel fue la culminación de la filosofía idealista alemana creada por Immanuel Kant.

Para Hegel, nuestro mundo es un mundo de razón. El estado es la Absoluta Razón y el ciudadano sólo puede ser libre adorando y obedeciendo al estado. Hegel llamó al estado la "marcha de Dios en el mundo" y el "objetivo final". Este objetivo final "tiene suprema autoridad hacia el individuo, cuya suprema obligación es ser miembro del estado". Tanto el fascismo como el comunismo tienen su raíz filosófica en el hegelianismo. La filosofía hegeliana estaba muy de moda durante la estancia de William Russell en Alemania.

Cuando Russell regresó a Yale en 1832, formó una sociedad con Alphonso Taft. De acuerdo a la información obtenida con una inspección de la "Tumba" (el lugar de reunión de "Skull and Bones") los "Bones" serían una sección de otra organización de la Universidad de Alemania. El General Russell, su fundador, estaba en Alemania y formó una cálida amistad con un grupo selecto de la sociedad Alemana. Por tanto, trajo consigo la autoridad para formar una sección en Estados Unidos. Russell junto con otros catorce, fueron los miembros fundadores de La Orden Skull and Bones.Esta orden secreta existe sólo en Yale. Quince jóvenes son seleccionados cada año para ser iniciados en el grupo. Algunos dicen que cada miembro recibe 15,000 dólares y un reloj. El grupo es dirigido para convertirse en triunfadores al terminar la universidad.

Los nombres del roster parecen ser parte un grupo elite, Lord, Whitney, Taft, Jay, Bundy, Harriman, Weyerhaeuser, Pinchot, Rockefeller, Goodyear, Sloane, Stimson, Phelps, Perkins, Pillsbury, Kellogg, Vanderbilt, Bush, Lovett, etc.

William Russell se convirtió en General y legislador estatal en Connecticut. Alphonso Taft fue escogido como Fiscal General de los Estados Unidos, Secretario de Guerra, Embajador en Austria, Embajador en Russia. Su hijo William Howard Taft, ha sido el único que ha sido Presidente de los Estados Unidos y Jefe de la Suprema Corte.

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EUROPA NECESITA 160 MILLONES DE INMIGRANTES

La faz de Europa cambiará drásticamente en el próximo medio siglo. Según las predicciones de la División de Población de las Naciones Unidas publicadas en enero del año 2.000 el viejo continente deberá abrir de par en par sus puertas para paliar el progresivo déficit poblacional que el envejecimiento de la población autóctona conllevará. La cifra es indicativa: 159.000.000 de inmigrantes habrán de instalarse en el viejo contienente. La caída de población será extensible a todos los países del primer mundo, incluyendo Japón, Corea del Sur y los EEUU. 

A la vista de lo que está sucediendo en España en la actualidad, resulta claro que  la inmigración no es algo tan inevitable como se quiere presentar a una ciudadanía desarmada y anestesiada por la propaganda de los mass media. Si analizamos que está noticia es de inicios del 2.000 y estamos entrando prácticamente en el 2.007 podremos deducir que las predicciones de Naciones Unidas se están cumpliendo al milímetro.

 

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LA VERDAD SOBRE LAS NACIONES UNIDAS

Las Naciones Unidas gozan hoy en día de un inmerecido prestigio. Una hábil labor de propaganda realizada por los medios de comunicación dependientes de la élite plutocrática ha conseguido que esta organización fundada en 1945 haya conseguido presentarse como un modelo de gobierno adecuado para la globalización. Sin embargo numerosos hechos han sido ocultados a la opinión pública, en los libros escolares, en los noticiarios etc. que revelan una realidad completamente diferente y a la vez aterradora de una organización cuoy objetivo último es el gobierno global. Presentamos un texto traducido del inglés y difundido en algunas webs americanas donde se presenta una cara menos amable de este organismo internacional. Texto Original

1. La filosofía en la que se fundamenta la ONU es Antiamericana y pro-totalitaria. Nuestra declaración de independencia proclama la “evidente” verdad que los “hombres son dotados por el Creador con ciertos derechos inalienables”. Pero en su Convenio sobre Derechos Civiles y políticos, La ONU ignora la existencia de Dios, implica que ella garantiza los derechos, y repetidamente afirma poder “ tal como prevé la ley” para suprimirlos. Si algún gobierno puede aplicar restricciones en derechos fundamentales como la libertad de expresión, el derecho a conservar y llevar armas, la libertad de prensa, asociación, movimiento y religión, en poco tiempo no existirán tales libertades.

2. La ONU fue fundada por comunistas y miembros del CFR cuyo objetivo común era un gobierno mundial socialista. Dieciséis importantes oficiales estadounidenses que diseñaron las políticas encaminadas a la creación de las Naciones Unidas fueron identificados más tarde como criptocomunistas. Entre estos estaban Alger Hiss, principal organizador de la conferencia fundacional en 1945, y el ayudante del Secretario del Tesoro Harry Dexter White. La Unión Soviética de Stalin y el aparato del Partido Comunista de los Estados Unidos al completo trabajaron incansablemente para promocionar a las Naciones Unidas. Desde sus inicios en 1921 el Council of Foreign Relations (CFR) ha trabajado siempre por un gobierno mundial. El principal fundador del CFR, Edward Mandell House, en su libro "Philip Dru: Administrador” pedía “el socialismo tal como lo soñó Karl Marx”. El CFR fue un promotor temprano de la ONU y 43 miembros de la delegación norteamericana en la conferencia fundacional de la organización eran o serían miembros del CFR.

3. Las Naciones Unidas siempre han elegido a socialistas mundialistas como líderes. El secretario general en la conferencia fundacional de la ONU fue el espía soviético Alger Hiss. Fue seguido como secretario general el socialista noruego Trygve Lie, el socialista sueco Dag Hammarskjold, el marxista U Thant, el antiguo nazi austríaco Kurt Waldheim, el socialista peruano Javier Pérez de Cuellar y el socialista egipcio Boutros-Ghali. Todos ellos han usado constantemente la totalidad de los recursos de la ONU para promover las causas socialista y comunista alrededor del mundo. La Internacional Socialista (que orgullosamente remonta sus orígenes a la primera internacional encabezada por Karl Marx) hoy dice que tiene decenas de millones de miembros en 54 países. En su congreso de 1962, declaró: “El objetivo último de los partidos de la Internacional Socialista es nada menos que el gobierno mundial...” La práctica totalidad de las comisiones “independientes” de la ONU de los últimos 30 años han sido encabezadas por miembros de la Internacional Socialista.

4. La ONU busca el poder para controlar el medioambiente, la población, la infancia, el mundo. Tanto el Programa Medioambiental de la ONU de 1972 como la Conferencia de Medio Ambiente y Desarrollo de 1992 dirigen sus planes para estimular mundialmente preocupaciones medioambientales.(Algunas de ellas exageradas, otras completamente inventadas). Esas preocupaciones serían usadas como justificación para incrementar la autoridad de la ONU sobre problemas medioambientales. Las afirmaciones y publicaciones de esos programas de las Naciones Unidas dejan pocas dudas de que su objetivo es un gobierno mundial con el poder para anular la soberanía nacional, regular la actividad económica y controlar la raza humana en su totalidad, eso si, con la bandera de “proteger el medioambiente”. A finales de 1994 planificadores de la ONU en una cumbre en Egipto aprobaron un plan de 20 años y 17 billones de dólares para “estabilizar” la población mundial. El objetivo de las Naciones Unidas es reducir selectivamente a la población por medio de fomentar el aborto, la esterilización y el crecimiento humano controlado. La Convención de las Naciones Unidas sobre los derechos del niño, también reclama poder no sólo para garantizar los derechos sino también para anularlos “tal como preveé la ley”. Reclama que los gobiernos deben garantizar a los niños la “libertad de expresión”... libertad de investigar, recibir e impartir información... libertad de pensamiento, conciencia y religión”, a pesar del deseo de sus padres.

5. La Carta de las Naciones Unidas perfila la senda a la tiranía mundial. Después de hablar sobre no-intervención “en cuestiones que esencialmente entran dentro de la jurisdicción interna de cualquier estado...” la Carta de las Naciones Unidas continúa “pero este principio no irá en prejuicio de la aplicación de medidas impuestas bajo el capítulo VII". El Capítulo VII discute sanciones y boicots pero si estimara que son “inadecuadas, podrá ejercer, por medio de fuerzas aéreas, navales o terrestres, la acción que sea necesaria para mantener o restablecer la paz y la seguridad internacionales”. La ONU usó esta amplia afirmación de autoridad como pretexto para su intervención armada en los tumultos internos de Somalia y Haití.

6. Las naciones Unidas Construyen su propio ejército para imporner su voluntad. En 1992, el secretario general de la ONU; Boutros–Ghali, cumpliendo una directiva del consejo de seguridad, reveló Un Programa para la Paz, un plan para reforzar las capacidades de las “Fuerzas de Paz” de la ONU. El plan pedía unas fuerzas armadas que estuvieran disponibles para las Naciones Unidas “permanentemente”. El plan siniestramente avisa: “La época de la soberanía absoluta y exclusiva ha acabado” y pasa a citar una larga lista de “riesgos para la estabilidad” que justificarían el uso del ejército “permanente” de la ONU para hacer cumplir su voluntad. Increíblemente los líderes estadounidenses usan el ejército americano para pavimentar el camino de un ejército de las Naciones Unidas. En Bosnia, Somalia, Haití, y en cualquier parte, comandantes extranjeros de la ONU han controlado nuestras tropas. Cuando 15 americanos fueron asesinados en Irak a mediados de 1994, el vicepresidente Gore, ofreció sus condolencias: “a las familias de aquellos que murieron al servicio de las Naciones Unidas”. Incomprensiblemente, ha sido política oficial del gobierno de los Estados Unidos desarmar a América y crear un ejército de la ONU. Esta política concluye: “Un desarme controlado y progresivo que llevaría a un punto donde ninguna nación tendría el poder suficiente para desafiar a las progresivamente reforzadas Fuerzas de Paz de las Naciones Unidas”.

7. La ONU no calma las disputas, las empeora. En 1982 nuestro embajador en la ONU , aunque defensor de la misma admitió: “La ONU se ha convertido en una arena en la que los países son arrastrados hacia problemas en los cuales nunca hubieran estado envueltos”. Pregúntese: ¿Deberían las Seychelles o Begin o Guyana o Barbados tomar parte en un conflicto que estalla en el lado opuesto del mundo? Cuando siglos de rencillas estallan en la antigua Yugoslavia , por qué los Estados Unidos inyectan su presencia con tropas, bloqueos, bombardeos y desfiles ? Las tropas americanas que sirven como “globocops” para la ONU se convierten en objetivo de criminales y terroristas. En 1983, 241 marines murieron tras la explosión en el aeropuerto de Beirut. Cinco años más tarde, un teniente coronel de los marines fue secuestrado y finalmente asesinado por terroristas árabes mientras estaba en una unidad de la ONU en el Líbano, (tal como requerían las Naciones Unidas).La Misión de “Pacificación” en Somalia costó la vida de otros 36 americanos en 1.993.

8. Las Naciones Unidas ignoran las atrocidades comunistas pero tiene en su punta de mira a las naciones no comunistas y a sus líderes. Cuando los tanques soviéticos rodaron hacia Hungría en la década de los 50, cuando los comunistas chinos asesinaban a los tibetanos en la década de los 60, cuando los soviéticos masacraban civiles en Afganistán en los 70 y los 80, cuando Chechenia fue machacada por los rusos en 1990, las Naciones Unidas no hicieron nada. Pero la ONU declararó a la pequeña Rodhesia “una amenaza para la paz internacional” en los 60, permitiendo al terrorista pro-comunista Robert Mugabe llegar al poder. Y fue una campaña dirigida por Naciones Unidas la que trajo al autodenominado comunista y convicto de terrorismo Nelson Mandela al poder en Sudáfrica.

9. La ONU acepta a la China comunista, el régimen criminal más grande de la historia. En 1949, la China Nacionalista Anti-comunista, uno de los miembros fundadores de las Naciones Unidas fue expulsada desde el continente a Taiwan por los comunistas. En 1971 La ONU expulsó a Taiwan y aceptó al brutal gobierno comunista chino, un gobierno responsable de 35.000.000 de asesinatos. Cuando se anunció la admisión del voto de la China Comunista, los delegados de las Naciones Unidas bailaron en los pasillos para mostrar su desprecio a América y su alegría por el triunfo de la China Comunista.

10. La ONU es un pozo negro de moral lleno de pervertidos y peces gordos. En 1993 el Consejo Económico y Social de la ONU concedió status consultivo a la International Gay and Lesbian Association que incluye a la North American Man/Boy Love Association (defensora del abuso sexual de niños) y el grupo holandés Vereniging Martijn (que también promueve la utilización de niños como objetos sexuales).En 1988, en la cumbre de Bégica del Fondo de la Infancia de Naciones Unidas el titular fue un grupo convicto de controlar una red sexual infantil.La bancarrota moral es frecuente en las operaciones de las Naciones Unidas. En Zimbabwe, equipamiento donado por UNICEF ayudó a los terroristas a alzarse con el poder. En Vietnam, los Comunistas recibieron 13 millones de dólares de la UNICEF mientras miles de anónimos huían en barcos para salvar sus vidas. ¿peces gordos? Los empleados de las Naciones Unidas cobran en comparación con los trabajadores estadounidenses un 40 % más y tienen el Alquiler subvencionado. Un ex funcionario de UNICEF confirmó que "funcionarios mimados” de diversas agencias humanitarias "absorben el 80 % de los gastos de las Naciones Unidas"

11. América aporta el dinero, luego las Naciones Unidas financian a tiranos y diversos enemigos de los Estados Unidos y las condiciones en las naciones “ayudadas” empeoran. Los impuestos estadounidenses pagan el 25% del presupuesto de las Naciones Unidas más un 31% de los presupuestos de las agencias especiales. Miles de millones adicionales van al FMI, al Banco Mundial y a otras agencias relacionadas donde son usados increíblemente para programas de derroche y subversión de las Naciones Unidas. (No es sorprendente puesto que esas agencias fueron diseñadas por el agente soviético Harry Dexter White y el socialista fabiano John Maynard Keynes). El portavoz de la Internacional Socialista Hillary Marquand describió acertadamente el FMI como “en esencia una concepción socialista”. Los fondos de “ayuda” del Banco Mundial fueron a manos del brutal dictador marxista Meginstu mientras causaba a gran escala hambruna y muerte en Etiopía. Para Tanzania el dictador Julius Nyerere quesacó de sus tierras a los campesinos e incendió sus chozas; y a los vietnamitas comunistas, expulsando a miles de personas. Incluso la revista Newsweek concluyó que los programas de ayuda de Naciones Unidas tienden a apoyar gobiernos incompetentes o a subvencionar economías que nunca aguantaran por ellas mismas.

12. Naciones Unidas es una organización de bélica, no una organización de paz. El artículo 42 de la carta de la ONU reclama autoridad para “tomar por medio de fuerzas aéreas, navales o terrestres, la acción que sea necesaria para mantener o restablecer la paz y la seguridad”. Pero la definición de paz de las Naciones Unidas se desconoce. Los regímenes tiránicos a lo largo de la historia han definido la “paz” como la ausencia de toda oposición. Para conseguir la “paz” en 1961 en Katanga, Naciones Unidas planearon bombardear hospitales, escuelas, edificios administrativos, y casas privadas. Katanga fue una provincia anticomunista del Congo belga que buscaba la libertad del gobierno central controlado por los comunistas. La ONU ni es ni ha sido una organización pacífica. Usará cualquier poder militar que le sea dado para forzar a todas la naciones del mundo a someterse.