Pensé que ya no lo encontraba

De veras, tras muchos años, regreso a este blog, donde, según me da la memoria empecé a escribir allá por el año 2004.

Ubuntu

¿Qué es Ubuntu?
Imagina que vas por una calle y ves un concesionario de coches. Son preciosos, todo el mundo tiene uno. Tú, claro, necesitas moverte, así que entras. Los coches son preciosos, mucho diseño, hacen muchas cosas, tienen muchos colorines y sobre todo son fáciles de conducir.
Hay un problema, son caros, muy caros, carísimos, y de vez en cuando se paran, o se averían sin saber por qué, tienes que bajarte y volverte a subir. A veces apareces al principio del trayecto cuando ya casi terminabas un viaje de tres ó cuatro horas.
No importa, tú quiere un coche y vas a tener un coche. Como no tienes mucho dinero, o si lo tienes no tienes ganas de gastártelo, conoces a un amigo que te franqueará la puerta trasera y cogerás uno, al fin y al cabo la empresa no lo va a notar y nadie te va a pedir la factura de compra si es para uso personal.
Sin embargo un poco más adelante hay un grupo de artesanos trabajando cada uno a lo suyo por diversión. Hacen tanques. Tanques poderosos, potentes, rápidos, que pueden circular por casi todos los terrenos, arrastrar casi un tren de vagones. Si, no son tan bonitos, sí, son un poco más difíciles de conducir, pero son gratis y encima te dan los planos, si sabes mecánica puedes añadirles misiles, o quitarles el cañon, si eres pacifista o añadirles un arado y usarlos como tractor si eres agricultor o una pala y usarlo como excavadora si quieres. En fin que por un poco más esfuerzo en aprender tienes mucho más.
Bueno, pues un amigo me regaló una distribución de Ubuntu que es un tanque de esos, un GNU/Linux sudafricano basado en Debian y soportado por canonical. Lo probé y estoy encantado.
Aún estoy aprendiendo, aún no me funciona todo al 100%, pero...

Sandra y sus problemas

El otro día la gran hermana Sandra "la guaja" a la que a mi me costaba entender, se marchó. Yo creo que, diga lo que diga, se arrepentirá de haber ido. Y sustento mi creencia en estas razones:
a) Ha demostrado un egoimo sin límites
b) Su "relación" con la comida era cuanto menos "problemática"
c) Se metía a discutir cuando le apetecía y luego mandaba callar a los demás, es decir discutía cuando quería y luego se negaba, de hecho es la persona que más veces ha dicho "¡cállate!"
d) Trabajaba poco, lento y mal
e) Su excusa para todo era su salud, perdona bonita, si tan mal estás no vayas, nadie te obliga
f) La culpa de todo lo que le pasaba la tenían los demás "Jodísteisme la comida"
g) Mercedes Milá en un ejercicio de contención le dijo que a lo mejor siempre había vivido en su mundo feliz y Gran Hermano había sido poner los pie en el suelo
Por todas estas razones recomiendo que visite urgentemente a un psicólogo, psiquiatra o gurú de secta. O mejor aún que se ponga a trabajar para aprender lo que vale un peine so caprichosa y consentidona.
Lo que puede hacer una mala educación ¿eh?

Por fin

Os contaba el otro día que estaba enganchado a un blog. Pues ha estado unos días sin postear y casi he tenido síndrome de abstinencia. ¡Qué pasada! ¡Lo cotilla que puede llegar a ser uno e interesarse por cosas que ni le van ni le vienen, pero...
Por si acaso quieres engancharte

¿Cuando se desmadró todo?

Ayer vi en la tele un programa del corazón. Hablaban de la gallina de los huevos de oro. Con la diferencia de que la gallina original daba riquezas sólo mientras vivía y esta gallina rediviva, supóngo que genéticamente mejorada, da beneficios aún muerta. Como Elvis que es uno de los artistas que más sigue produciendo y fíjate lo que hace que dejo de dar conciertos.
Todos van a los programas a "trincar", a meterse unos con otros a sacar algún detalle más o menos morboso o más o menos polémico de la ya archiconocida vida de quien hizo del famoseo y las exclusivas su modus vivendi.
Y yo me pregunto ¿Cómo hemos llegado hasta aquí? ¿cuándo se empezó a desmadrar todo?
Dicen que si metes a una rana en agua hirviendo salta de la cazuela inmediatamente. Sin embargo si la metes en una cazuela de agua fría y poco a poco vas calentando el agua se cuece sin darse cuenta.
Metamos el termómetro en el agua televisiva y comprobemos que la temperatura sólo es soportable porque nos hemos ido acostumbrando a ella paulatinamente.
Vamos que siempre han existido cotillas y porteras en nuestra geografía nacional tanto rural como urbana pero nadie hacía de eso su oficio. Incluso los muy mal vistos "huelebraguetas",denominación despectiva que algunos daban a los detectives privados, a pesar de averiguar las intimidades no las aireaban a todo el que quisiera oirlas.
De algunos personajes sabemos más de su azarosa vida ¿sentimental? ¿sexual? que de lo que deberíamos saber: su trayectoria y logros laborales. Por poner un ejemplo: ¿Alguien sabe a qué se dedica el Conde Lequio? quiero decir a parte de dar su opinión en tertulias del hígado (me niego a relacionar todos esos programas con un órgano tan desinteresado y noble como el corazón).
A veces pienso en la de recursos, sí, tiempo de televisión, horas de investigación de personas, en principio, preparadas que se desperdician en cometidos de tan evidente utilidad pública. ¿qué pasaría si esas personas se dedicasen a periodismo de verdad? o por lo menos a entretenimiento de verdad...
En fin, voy que empieza "Donde-estás-salsa-de-corazón-corazón-a-tu-lado-dia-a-dia-a-la-carta"

¿Será posible?

Soy un recién llegado a lo que algunos denominan "blogosfera" y sin embargo no me puedo creer lo adictivo que puede llegar a ser tanto el escribir sobre tí como el leer lo que otros escriben sobre ellos mismos.
Hace poco me enganché a un blog de un hombre al que, según él, su ex le hacía la vida imposible acusándole de unos malos tratos inexistentes para coseguir mayores ventajas en las condiciones del divorcio.
Independientemente de lo grave que me parece el tema dada la ya de por sí preocupante problemática del terrorísmo doméstico, he vivido mi "enganche" a dicho blog como si de repente empiezas a ver un culebrón en la tele y luego no puedes dejar de verlo. De hecho si algún día no tengo mi ración diaria lo echo de menos.
Además en el culebrón no puedes hablar a los protagonistas y decirles si estás de acuerdo con ellos o si no, o si les ves bajos darles ánimos o felicitarles cuando las cosas les salen bien...
¿Será posible que algunos blog sean los "culebrones" del naciente ciberespacio?

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