Bits, el nuevo escenario de los negocios
Dos semanas estuvo en acuartelamiento de primer grado la cúpula ejecutiva de una de las entidades financieras más importantes de Colombia, en un intento por tratar de redefinir el negocio preciso en el que estaba la compañía. Inicialmente se impusieron las visiones tradicionales que hacían referencia al dinero, al crédito, al ahorro y hasta al servicio. Sin embargo, poco a poco, todos fueron confluyendo hacia una misma conclusión: nuestro negocio es la información.
¿Como así que la información... si el negocio de un banco es captar, invertir y prestar dinero?. Pues resulta que no. Si el universo se analizara en términos de átomos exclusivamente el planteamiento sería válido, pero resulta que cada vez gana más espacio un universo paralelo donde las cosas existen en términos de bits y donde cualquier negocio se plantea como un intercambio de información.
El asunto es más fácil de comprender con un ejemplo: su empresa le paga su salario mediante una transferencia electrónica (transacción de información), usted consulta su pago a través de la Internet o el teléfono (transacción de información), luego usted decide pagar sus servicios públicos por Internet (transacción de información). Sin que fluyera un solo átomo (dinero) el banco ha participado de tres negocios, donde su función fue compartir información.
En su libro Ser Digital Nicholas Negroponte, director del Media Lab del MIT y uno de los hombres con mayor visión en el tema tecnológico, advierte que en el mundo se sigue midiendo el comercio y escribiendo los balances pensando en átomos, pero el futuro de muchas empresas pasa por la capacidad que tengan de generar productos o servicios en forma digital (bits).
Si no cree que esta transformación sea un asunto para tener en cuenta, después de que termine de leer este artículo vaya a dar una vuelta por el local más cercano de productos fotográficos y revelado (si aún existe) y se dará cuenta cómo todas los pilares que sostenían un negocio cambiaron en la medida en que el mismo se acercó al universo de lo digital. Si no le queda tiempo, simplemente ingrese a Kodak.com y mire si por algún lado le venden películas fotográficas tradicionales, que fue su gran negocio hasta hace muy poco.
A quienes pasamos de los 15 años (todos los que leen este artículo) nos queda más difícil entender el tema, pero hay una generación nueva que, por ejemplo, no querrá ir nunca más a la tienda de video y que mediante transacciones electrónicas desde sus computadores o televisores avanzados, podrán cambiar el panorama de un sábado por la noche alquilando remotamente una película que les llegará a través de la conexión a la red y que pagarán con una transacción electrónica.
Es muy simple saber aquí y ahora si usted ya está sintonizado con el universo de lo digital: si aún se encuentra leyendo este artículo en la pantalla de su computadora usted comienza a clasificar para el mundo que se avecina, pero si lo tiene impreso en una hoja de papel, acaba de desconocer uno de los mejores argumentos para la digitalización del universo, que es nada más y nada menos que el ahorro de recursos. ¿Cuánta energía, papel y demás se gastó imprimiendo?.
En la medida en que se consiga que las pantallas de computador se parezcan más a una hoja de papel, industrias como las de los libros de texto cambiarán radicalmente gracias a su conversión en bits. Un artículo de primera necesidad como son los libros universitarios tiene el 45% de sus costos representados en actividades de logística, lo que quiere decir que su digitalización de entrada permitiría bajar su precio casi a la mitad.
Regresando a nuestro cause temático inicial, tal vez ningún sector experimente un cambio tan dramático por cuenta de la digitalización del mundo que el financiero. Un solo sitio de Internet altamente transaccional en un banco, puede reemplazar la labor de cientos de oficinas físicas y sus respectivos empleados, con una disminución de más del 90% en los costos por transacción y con la posibilidad de cobrarle al usuario por la misma.
Es por ello que para cerrar este artículo los invitamos a que conozcan un estudio de Asobancaria sobre el uso de Internet en la banca colombiana, donde muestra la importancia que le está dando el sector este canal y nos permite demostrar que el mundo digital no es cosa del futuro. Click para el estudio en PDF