Fiesta de Medicina en La Ola
La noche pintaba bastante bien desde un principio, éramos muchos y estábamos bebiendo, unos unas cosas y yo coca-cola. La vedad es que el buen rollo flotaba en el ambiente, cada uno con su copa y cada vez más desinhibidos y charlatanes, en esto aparece Pedro el Gallego y Jaime, las cosas siguen mejorando.
Entre unas cosas y otras José se mosquea porque su botella de ron esta más vacía de lo que debiera, así que se la echa debajo del brazo para que no hayan más problemas.
Éramos muchos, así que la gente iba rulando de grupo en grupo hablando y aportando opiniones, se pasa el tiempo volando y unas gotas que empezaron a caer nos recordaron que debíamos entrar al local.
Ni si quiera habíamos entrado todos cuando ya empezaron los problemas, Sonia y Carolina, se quedaron fuera porque Tana les había dejado unas entradas defectuosas, sin ninguna mala fe, claro está. Al final se soluciono y pudieron entrar.
Las cosas en el interior parecían que nos lo íbamos a pasar bien, la música era aceptable, estábamos animados y Paco estaba en su salsa, por cierto tenemos que mencionar el hecho de que Pablo, el hermano menor de los Gil estaba enzarzado una cachonda, como diría su propio hermano.
Los que estaban encima de la tarima se lo estaban pasando de puta madre con los nuevos colegas de Paco, que no paraban de abrazarlo para demostrarles el buen rollo que había. Entre baile va baile viene, whisky que me tomo, ron que me entra las cosas empezaron a desmadrase, un síntoma era el baile de Jose, que sin duda era el que estaba mas a gusto de todos, los que lo vieron sabrán de que tipo de baile me refiero.
Está fue la cima de la campana de Gauss de la noche, una serie de despropósitos continuados hicieron que la noche empezara a decaer, Jose se corto con un baso roto, pero fue a el al que menos le importó, después el cansancio empezó a hacer mella en nosotros, la música no nos terminaba de convencer, casi se pegan un integrante del grupo (al final se soluciono todo) y para colmo nos echaron del local las 5 de la mañana, cosa que enfado a muchos.
Y para finalizar el incidente de Paco que fue realmente una mala suerte que estuvieran esos mamones dentro de la ola.
Yo me quedo con todo el botellón que fue lo más entretenido aunque yo no bebiera nada.